¿Cómo trabajo?
Probablemente buscas algo diferente. O no.
Pero justo eso es lo que te ofrezco.
Trabajo efectivo, por lo tanto: rápido.
La mayoría de mis clientes necesitan 7 sesiones o menos (Y eso, es posible que no lo sepas, pero son pocas).
¿El truco?
Haber aprendido de un referente nacional cosas que ningún máster te enseña.
Esto no es magia ni marketing: es metodología.
Ojo! Con la terapia de pareja la cosa cambia. El modelo que uso (el más avalado científicamente) se centra en emociones, y las emociones van a su aire y a su ritmo.
Tú marcas el ritmo.
Solo te pediré dos sesiones cercanas en el tiempo:
Primera: Evaluación. A veces lo veo tan claro que voy directo al grano.
Segunda: Devolución e intervención. Y, en ocasiones, no hace falta más.
Después de eso, tú marcas el ritmo.
Y en algún momento te animaré a espaciar más las sesiones o incluso a seguir por tu cuenta cuando vea que vas bien.
Y si necesitas volver, ahí estaré.
¿Te has olvidado de acudir a la cita de hoy ? No me molesta, todo lo contrario ¡Es buena señal!
Porque al psicólogo, como al médico: cuando hace falta (y si no hace falta, mejor).
Hago sesiones «largas».
Nada de los típicos 50 o 60 minutos. Hora y media.
Las sesiones son largas, pero el tratamiento es corto.
Honestidad, compromiso y viceversa.
El objetivo no es llenar mi agenda, sino que avances. (Si a ti te va bien, a mí me irá bien).
Sin adornos innecesarios.
Tengo mucha formación y experiencia, pero lo que no tengo son ganas de marearte con tecnicismos.
Hablo claro, sencillo y en consulta encontrarás un profesional cercano.
PD: Un secreto sobre la duración de la terapia
En Internet dicen que los psicólogos/as no podemos saber cuántas sesiones vas a necesitar.
Cierto… a medias. Si todo va normal, podemos hacernos una idea aproximada.
Pero, por no llevarle la contraria a Internet, según mi experiencia:
Las sesiones que necesitarías con otros modelos terapeuticos, divídelas entre dos. 🔥
Para resultados con la mitad de sesiones, 👇
